Xosé Manuel Baltar Blanco, presidente de la Diputación de Ourense, inauguró hoy en el Instituto Santiago Apóstol de Buenos Aires el aula Eduardo Blanco-Amor, lugar de estudio de los chicos y chicas de 5.º curso de Bachillerato del colegio.

Después de recorrer las instalaciones del centro educativo, compartir experiencias con los más jóvenes e interiorizarse de las actividades que desarrolla la institución, Xosé Manuel Baltar, acompañado por una comitiva orensana en la que estaban, entre otros, los alcaldes de O Carballiño,  Fancisco  Fumega; de Celanova, Xosé Luís Ferro, y Petín, Miguel Bautista Carballo; representantes de los diferentes grupos políticos de la provincia de Ourense; el presidente de la Fundación Otero Pedrayo, Juan Luis Saco; el secretario de la Fundación Curros Enríquez, Antonio Piñeiro y el presidente del Centro PEN Galicia, Luis  G. Tosar, se acercó a saludar al alumnado mayor del instituto.

Los alumnos Rocío de León y Facundo Pedrozo le dieron la bienvenida destacando: “Nos consideramos, señor presidente, una parte de Galicia, conocemos su historia pretérita, valoramos su realidad presente y trabajamos para contribuir con humildad en su fértil futuro. Somos, don Xosé Manuel, un pilar activo que con nuestro estudio y preparación llevamos ahora y llevaremos en los trabajos que desempeñemos en el día de mañana a Galicia siempre presente como constituyente de nuestra personalidad”. Al mismo tiempo, añadieron: “Somos fieles garantes de una marca que ha de huir de ornamentos improductivos y debe sumergirse en el mundo vertiginoso del siglo presente con conocimiento y sabiduría. Creemos en una marca ´Galicia´ que tiene potencialidad para insertarse en el mundo sin complejos, simplemente compartiendo espacios y viajando por caminos de concordia intransitados”.

En la alocución, seguida con mucha atención por el presidente y los acompañantes, los presentadores no se olvidaron de Ourense y recordaron al Grupo Nós: “Vienen ustedes de una provincia que cobijó quizá a la generación más importante que dio la cultura gallega. Un grupo de hombres que construyeron su universalidad sin olvidar las singularidades; hombres que creían en un mundo diverso y plural, gente que sin desechar su punto de partida viajaron “arredor de si” para erguir a los gallegos hasta una dimensión universal”.

Manuel Peleteiro Pérez, presidente de la Delegación argentina de la Fundación Galicia América, propietaria del centro de estudios, tomó la palabra para agradecerles a los visitantes el interés mostrado por el colegio y les pidió que sigan acompañando la tarea pedagógico-institucional con la certeza de que este instituto es la obra más trascendente que la comunidad gallega pudo edificar, pues permitirá un prometedor futuro para la cultura de Galicia en la Argentina.

Xosé Manuel Baltar se dirigió a los chicos y chicas que lo escuchaban agradeciéndoles su compromiso y cariño hacia el patrimonio gallego y les pidió que siguieran construyendo Galicia con su trabajo cotidiano, que proyectaran su futuro llevando siempre la tierra gallega consigo y que no olviden que el Santiago Apóstol tiene un lugar en Ourense y Ourense lo tiene en el Santiago Apóstol.

Luego de los discursos y saludos con los chicos, Xosé Manuel Baltar, Manuel Peleteiro y el alumno Matías Ávalos en representación de sus compañeros inauguraron el aula Blanco-Amor descubriendo una placa que testimonia tal hecho. El poeta Luís González Tosar recordó al autor de “A esmorga” con cariño y emoción. De él dijo que era un hombre bueno, incomprendido muchas veces, y un referente para la cultura gallega. “Hoy Blanco-Amor estará feliz”, concluyó.

Para cerrar la visita, el presidente de la diputación orensana mantuvo un encuentro con la Delegación argentina de la Fundación Galicia América y firmó el libro de oro institucional.

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