Comienza a Gestarse el Colegio
A fines de 1991, el titular de la entidad, Avelino García Melle, Álvaro Campos, en su carácter de Tesorero de la Junta Directiva del Centro y D. Darío Lamazares vuelven a territorio gallego, para continuar con la tarea de promoción y búsqueda de apoyo para comenzar las tareas de erección del Instituto Educativo. Para tal fin, los representantes de esta asociación se reúnen con la Sra. Carmela Arias y Díaz de Rábago, a cargo de la Fundación Pedro Barrié de la Maza, Conde Fenosa. Posteriormente, esta Delegación también se entrevista con el Presidente del Banco Pastor. En ambas reuniones, surge la problemática legal para poder realizar las contribuciones que requería una obra de la envergadura que planteaban los enviados del Centro Galicia.
Luego de estas entrevistas, solicitan audiencia al Presidente de la Xunta de Galicia, D. Manuel Fraga Iribarne y en la misma el mandatario gallego torna conocimiento de tal inconveniente. Fiel al apoyo explicitado desde aquella inauguración de la Primera Etapa de la Nueva Sede Social en 1989, el Sr. Fraga Iribarne da instrucciones a su Gabinete para buscar la forma de cooperación que requería la obra del Instituto Gallego-Argentino, teniendo en cuenta que dicho anteproyecto había concitado no sólo su particular atención, sino que ya pasaba a ser una empresa que debía encararse de manera inmediata, teniendo en cuenta el beneficio que podría brindarse a los descendientes de emigrantes en Buenos Aires.
Mil novecientos noventa y dos marca otro hito en el historial de la obra a la que nos referimos. El 6 de agosto de 1992, visita la Argentina el, en ese entonces, Conselleiro de Relaciones Institucionales de la Xunta de Galicia, D. Víctor Manuel Vazquez Portomeñe. En esa oportunidad trae el mandato del Presidente de la Xunta de Galicia, Don Manuel Fraga Iribarne, de promocionar el Año Santo Compostelano de 1993 y, a la par, la de ratificar la voluntad de ese Gobierno de apoyar la construcción del Primer Colegio Gallego-Argentino en Buenos Aires. Ello se logró gracias al Convenio de Colaboración firmado entre la Xunta de Galicia y esta entidad, por el cual el primero, gracias a los aportes de seis Consellerías gubernamentales, se comprometieron a abonar al Centro Galicia la suma de ciento ochenta millones de pesetas a los efectos de “realizar las obras de construcción de la Nueva Sede Social, en la cual se impartirá la enseñanza de la lengua gallega, en el Colegio que se ubicará en la sede de dicho Centro”, así como “crear en dicho Centro de un aula permanente de cultura gallega”. Este Convenio ofrece el punto de partida para el comienzo de ejecución de las obras del Colegio.
Durante 1992, la Junta Directiva aprueba la ejecución de las obras del Colegio, en el predio de J.J. Paso 51/71, colindante con la Nueva Sede Social.
A la par que se desarrollaban estos hechos, la Junta Directiva, a instancias de la propuesta del Presidente, Avelino García Melle, aprueba la formación de una Comisión de Colegio, la cual tenía como función estructurar las necesidades y articular las bases legales, éticas y educacionales del futuro Centro Gallego-Argentino de Enseñanza. Este grupo de trabajo estuvo formado por distintas personalidades de la Comunidad Gallega de Buenos Aires, es decir, personas experimentadas, con conocimiento de nuestra Comunidad. La Junta Directiva pusio en funciones a la Comisión de Colegio el 16 de diciembre 1992. La misma fue presidida por el Sr. Darío Lamazares. Las tareas de esta Comisión de Colegio se pueden resumir de la siguiente manera:
a)-Poner en marcha un nuevo modelo cultural-educacional, como concreción del anhelo surgido con la histórica fusión de las cuatro entidades provinciales gallegas, en el año 1979.
b)- Un programa educativo de tres niveles (preescolar, primario y secundario), basado en la educación bicultural gallego-argentina y con alcance de bachillerato internacional y
c)- A los efectos de dar mayor énfasis al nuevo instituto, a la par que eficacia en su gestión, se deberá preparar la formación de un ente jurídico autónomo del Centro, sea una fundación o patronato que tenga por objeto el desarrollo de actividades dentro del colegio asegurando a través de sus estatutos el permanente sostenimiento de dichas actividades.
Por otro lado, la Comisión de Sede informaba en la Memoria de 1992 que ya estaba trabajando en la Segunda Etapa de construcción, con las fachadas y techos correspondientes. También daba de que la cubierta metálica correspondiente al Gimnasio Mini-Estadio se encontraba finalizada, comenzando a trabajar en el piso, así como en los servicios anexos.