NUESTROS COMIENZOS

El Centro Galicia de Buenos Aires fue creado gracias a la valiente decisión de un significativo grupo de dirigentes gallegos, apoyados por los asociados de las distintas entidades que le dieron vida. Tampoco nuestra entidad surgió por generación espontánea, sino que nació en la necesidad y en la inteligencia de unir aquellos esfuerzos dispersos dentro de la Comunidad Gallega y así elaborar un proyecto común de crecimiento pero, por sobre todo, de continuidad en la defensa de los valores e identidad gallega.

Corría el mes de diciembre de 1978. Mediante convocatoria previa por parte del Centro Lucense de Buenos Aires, cuya presidencia estaba a cargo de José López Pin, se reúnen en la Sede Social de esa entidad los Presidentes, Vicepresidentes, Secretarios Generales y Tesoreros del Centro Orensano y la Asociación Gallega quienes, juntos a sus pares dueños de casa, comenzaron a elaborar un plan conjunto que llevara a conformar una nueva institución con basamento en las cuatro entidades provinciales de mayor arraigo en la Ciudad de Buenos Aires. Un primitivo fin los reunía: preservar para el futuro de la Comunidad Gallega los patrimonios físicos, humanos y culturales que poseía cada entidad. Cabe aclarar que, previo a es-tas reuniones, la Asociación Gallega era una naciente institución, formada por los Centros Coruñés y Pontevedrés, aunque siempre se ha nombrado a estas entidades como co-fundadoras del Centro Galicia de Buenos Aires, prescindiendo de esa anterior fusión.

En enero de 1979, las reuniones de estos directivos habían arrojado lineamientos básicos para alcanzar el propósito primitivo que perseguían. Entre otras consideraciones, ya se había estipulado la construcción de una sede social única, que representara el importante caudal societario y patrimonial que se comprometían en este emprendimiento fusionista. Asimismo, se estableció que se formaría una Comisión Provisoria de 21 miembros, aunque más tarde acordaría un total de 19, extractados de las cuatro entidades. Originalmente, esta Comisión Provisoria, sería integrada por nueve asociados del Centro Lucense de Buenos Aires, cinco socios de la recientemente formada Asociación Gallega y cinco por el Centro Orensano de Buenos Aires. El Acta Nro. 4 de esta Comisión Plenaria recoge que el 10 de abril de 1979, la Comisión Plenaria o Pro Fusión, así denominada, continuaba deliberando en la Sede del Centro Lucense de Buenos Aires, sita en Avda. Belgrano 1841, de esta ciudad, actual sede del Centro Galicia. Por aquellos meses esta Comisión decidió formar cuatro subcomisiones, formada por 2 miembros de cada asociación: la de Estatutos, tenía por fin elaborar el futuro Estatuto Social de la nueva institución; la Contable, debía efectuar un relevamiento del patrimonio existente en cada sociedad, a la par que coordinar todos los aspectos de la Memoria y Balance General que debía presentar cada una de las participantes en la fusión; la de Relaciones Públicas, tenía como finalidad dar a publicidad entre la Comunidad Gallega las gestiones que se estaban efectuando para formar esta nueva sociedad, a la par que proceder a invitar al resto de las institucionesgallegas de la Ciudad de Buenos Aires a esta “xuntanza” institucional; por último la de Coordinación o Supervisora, que debía ser la reguladora de las tareas que emprendía cada subcomisión, a los efectos de que se adapten a la entidad naciente.

En abril de 1979, la Comisión Plenaria aprueba que las asociaciones a fusionarse debían celebrar sus Asambleas Generales Ordinarias en fechas cercanas unas de otras, estableciéndose como mes clave el de Julio, mes de Galicia y Santiago Apóstol. Asimismo, en dichas Asambleas se debía considerar el Estatuto Social de la nueva asociación. En mayo del mismo año, se encontraba a disposición de la Comisión Plenaria el Anteproyecto de Estatuto Social del futuro Club Gallego de Buenos Aires, nombre que luego sería modificado, tiempo antes de firmarse el Convenio de Fusión. La Comisión actuante aprobó que se remitieran copias del Anteproyecto a cada Junta o Comisión Directiva de las entidades correspondientes, antes de ser presentado a los asociados y a los efectos de realizar aquellas modificaciones que creyeran oportunas. Por otro lado, se plan- tea la necesidad de buscar un solar donde tendría que construirse la Nueva Sede Social que representara el espíritu unionista que imperaba en estas instituciones.

A principios de junio, se aprueba que los Secretarios Generales de las tres sociedades a fusionarse redactaran el Convenio de Fusión, documento que se encontraba disponible a mediados del mismo mes. Asimismo, esta Comisión Plenaria estipuló la conformación de la Comisión Provisoria, que tendría a su cargo la administración del nuevo Centro hasta tanto no se eligieran las autoridades de la Primera Junta Directiva.

Dicha Comisión Provisoria estuvo compuesta por integrantes de las entidades que figuran en el cuadro adjunto. Sobre finales del mes de junio, la Comisión Plenaria aprueba prorrogar el mandato de las Comisiones Directivas de cada entidad a fusionarse hasta la Asamblea Constitutiva del nuevo Centro. Entre el 5 y 6 de octubre de 1979, cada entidad a fusionarse constituye a sus asociados en Asamblea General Extraordinaria, a los efectos de tratar el Convenio de Fusión, el cual es aprobado en cada asociación. En las mismas, se designaron a los miembros de la Comisión Provisoria. Cada uno de sus miembros fue aprobado en cada Asamblea. De esta forma, quedaba casi establecido que nacía una nueva institución: CENTRO GALICIA DE BUENOS AIRES. En los próximos meses, la actuación ya correspondería a la Comisión Provisoria.